Vida contemplativa I: Prácticas contemplativas en la vida diaria – vía Zoom

Os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros.
– Ezequiel 36:26

“La vida contemplativa comienza cuando damos el primer paso hacia el silencio de nuestro corazón. Es una peregrinación, un viaje que nos lleva primero a los confines internos de quiénes somos realmente y, desde allí, a la vida que debemos vivir”.
–Julie Saad, Vida contemplativa: descubriendo nuestro camino hacia el corazón de Dios

Este curso en línea de cuatro meses de duración es experiencial y guía a los participantes a profundizar su experiencia de la presencia permanente de Dios cultivando sus capacidades contemplativas. Los participantes aprenderán e integrarán prácticas espirituales contemplativas en la vida diaria dentro de una comunidad de buscadores a través de reuniones mensuales, una capilla de oración en línea semanal, prácticas personales y Círculos Sagrados de Escucha mensuales (dirección espiritual grupal). Las prácticas contemplativas son la puerta de entrada al don de la oración contemplativa, donde el viaje que comienza en el silencio de nuestro corazón nos lleva al corazón de Dios. A medida que cultivamos prácticas contemplativas en la vida diaria ordinaria, comenzamos a experimentar la unidad con Dios y toda la creación.

El diseño de los Vida contemplativa I: Prácticas contemplativas en la vida diaria:

Aprender, cultivar e integrar en la vida diaria las prácticas contemplativas de

• Oración centrante: una práctica contemplativa (meditación) cristiana silenciosa.
• Registro: una forma de escritura expresiva diseñada para ayudarlo a comprender y lidiar con pensamientos, recuerdos, preocupaciones, comentarios y emociones aflictivas y los comportamientos resultantes.
• Lectura espiritual: usar un libro espiritual, leer para formación en lugar de información, escuchar cómo Dios le habla en el pasaje.
• La oración activa: una frase u oración que usted crea o toma de las Escrituras u otra lectura significativa y repite a lo largo del día.
• Lectio Divina – orar con las Escrituras, permitiendo que el significado del texto y la experiencia de Dios crezcan más profundamente.
• La oración de bienvenida: dar la bienvenida a Dios en cualquier cosa que estés experimentando en la vida diaria: pensamientos, emociones, sensaciones corporales o comentarios.
• Descansar en Dios y guardar el sábado: el descanso es el estado de silencio interior que se experimenta en la vida diaria a través de la oración contemplativa. La observancia del sábado te despierta a este estado interior.
• Santa escucha: cultivar la receptividad para sintonizarnos con nuestra sabiduría interior, con Dios y con el movimiento de lo Divino en los demás.

Por favor, consulte el siguiente enlace para registrarse.