Gifts for Living 82: The Mystery of Hell

English Transcript

Gifts for Living 82: The Mystery of Hell

The eternal aspect of hell is what prompted Dante to say at the porthole for the entrance to hell “give up all hope here.” I believe that’s the text. So, to have no hope is to be inhuman. It is not to be human, because to live or to survive with any degree of endurance requires some ray of hope. Now if that hope is simply the natural reaction to a difficult good that is hard to attain but still possible, this is the natural form of hope that arises spontaneously when one is confronted with that scenario. But the hope that Scripture offers is different. It’s not about the future. Still less about the past. It’s about the eternal now in which God offers us his infinite mercy and his infinite power to carry out his compassion and will and the question of justice, which is never denied, is integrated into these other attributes of God, so that it should not be unduly emphasized as if it was the ultimate result of stuff. So the mystery then of hell is certainly presented in Jesus’s teaching needs to be researched prayerfully and deeply to try to grasp what it means in an era such as we are beginning to live in of profound psychological insight and facts about how the human psyche works in particular circumstances, situations and in the context of the whole of one’s life and of the basic influences that formed our concept of self or ego.

82. Semana del 24 de julio – El Misterio del Infierno

La característica eterna del infierno es lo que hizo que Dante dijera, en la entrada al infierno “renuncien aquí a toda esperanza.” Creo que ese es el texto. No tener ninguna esperanza es ser inhumano. Es no ser humano, porque vivir, o sobrevivir con algún grado de resistencia, necesita de un rayo de esperanza. Ahora bien, si esa esperanza es simplemente la reacción natural a un bien que es difícil de obtener, pero aún posible de obtener, esa es la forma natural de esperanza que surge espontáneamente cuando nos enfrentamos a esas circunstancias. Pero la esperanza que ofrecen las Escrituras es diferente. No se trata del futuro. Menos aún del pasado. Es acerca del eterno ahora en el que Dios nos ofrece su infinita misericordia y su infinito poder para manifestar su compasión y voluntad, y el tema de la justicia, que nunca es negado, es integrado con estos otros atributos de Dios, de modo que no necesite ser exageradamente enfatizado como si fuese el resultado final de todo. Entonces, ciertamente, el misterio del infierno es presentado en las enseñanzas de Jesús y necesita ser investigado en oración y en profundidad para tratar de comprender lo que significa en una era como la que estamos comenzando a vivir, de profunda comprensión psicológica acerca de cómo funciona la psiquis humana en circunstancias específicas, en situaciones y en el contexto de la totalidad de la propia vida, y de las influencias básicas que han formado nuestro concepto del yo o ego.