A weekly message from Fr. Thomas Keating on Awakening to the Contemplative Dimension of Life
English Transcript
The spiritual journey is a process that parallels
the process of life. If you have to let go of lower forms
or ideas of perceiving reality
that are proper to infants and children
in order to get to mature views of reality,
then why be surprised if you have to do the same
in the spiritual plane?
That’s really what the dark nights are about.
They’re a passive infusion of divine love
that assists us to do what we are too weak to do,
or haven’t got quite the guts to do under our own
human initiative, which is to face
the things in ourselves that are obstacles to growth
and to allow them to die by
letting go of them.
What was good is preserved or integrated into a higher view
of Christ, or of God. All that’s let go of is the childishness
or the undue identification with human props
that are no longer useful tools in the spiritual journey.
These served us at one level of our journey,
but now have to be laid aside.
We have to pick up a new set of tools proportionate
to the new wisdom or reality
that we’re dealing with.
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The words that I speak to you
I do not speak on my own.
The Father who dwells in me
is doing his works.
John 14: 10
Las Noches Oscuras, Pt 1
El viaje espiritual es un proceso análogo
al proceso de la vida. Si ebemos renunciar a formas de percibir la realidad
o a ideas que son propias de los niños
para adquirir una visión más madura de la realidad,
¿por qué nos sorprendería tener que hacer lo mismo
en el plano espiritual?
Es a eso a lo que se refieren las noches oscuras.
Son una infusión pasiva del amor divino
que nos ayuda a hacer lo que somos muy débiles para hacer,
o no nos atrevemos a hacer por propia iniciativa,
que es enfrentar las cosas en nosotros que nos impiden crecer
y permitirles morir
dejándolas ir.
Lo que era bueno es preservado o integrado en una visión más elevada
De Cristo o de Dios. Lo que dejamos ir es nuestro infantilismo o nuestra identificación
indebida con todo lo humano en lo que nos apoyamos
y que ya no son el tipo de herramientas que sirvan para el viaje espiritual.
Nos sirvieron en un nivel de nuestro viaje, pero ahora debemos dejarlas de lado.
Tenemos que usar nuevas herramientas que correspondan
a la nueva sabiduría o realidad
a la que nos estamos enfrentando.
ж
Las palabras que digo
no son mías:
el Padre que habita en mí
es el que hace las obras.
Juan 14:10